Nuestro cuerpo necesita ácido fólico, también llamado vitamina B9, para la formación de proteínas y hemoglobina. La falta de esta vitamina a menudo produce anemias, por eso es importante tener precaución y una determinada y adecuada ingesta durante el embarazo, sobre todo durante el primer trimestre de gestación.
Es necesario mantener una dieta saludable y un buen nivel de B9, ya que con ella ayudaremos a prevenir deformaciones en la placenta y evitaremos en muchos casos un aborto o un defecto en el tubo neural entre otros. También es importante para todas las mujeres en edad fértil, pues estos defectos ocurren normalmente durante los primeros 28 días del embarazo, cuando muchas mujeres desconocen incluso estar en cinta.
Los defectos del tubo neural más comunes son los siguientes:
- Espina bífida, fusión incompleta de la médula espinal y la columna vertebral.
- Anencefalia: subdesarrollo grave del cerebro.
- Encefalocele: desarrollo de una protuberancia de tejido cerebral hacia la piel causado por una abertura anormal en el cráneo.
A pesar de que no se conoce un nivel perjudicial para el ácido fólico, algunos estudios relacionan el exceso de vitamina B9 durante el tercer trimestre del embarazo con el desarrollo de asma en el bebé, por lo que a partir del segundo trimestre se recomienda bajar la dosis en relación al suplemento que estemos tomando.
A continuación facilitamos también un listado de alimentos beneficiosos que contienen vitamina B9 en mayor o menor medida:
- Verduras de hoja verde.
- Vísceras de animales.
- Legumbres.
- Levadura de cerveza.
- Frutos secos.
- Granos enteros.
- Alimentos enriquecidos.
Aunque no es necesario que el consumo de esta vitamina sea diario, ya que el B9 se acumula en el hígado, debemos tener en cuenta que conservando a temperatura ambiente el alimento y durante la cocción del mismo se pierden muchas de las propiedades de esta vitamina.