Ya sabéis que en Estudio Médico Navarro contamos con una gran variedad de tratamientos relacionados con el sector ginecológico y de fertilidad entre otros.
Hoy hemos decidido abordar en nuestro blog; la inseminación artificial. ¿En qué consiste exactamente?
Hacemos referencia a este término cuando existe un problema de fertilidad. Es una de las técnicas usadas en la rama de la Medicina Reproductiva, ya que consiste en la colocación de una muestra de semen, previamente preparada en el laboratorio, dentro del útero de una mujer para aumentar las posibilidades de fecundación.
Así propiciamos el encuentro entre el esperma y el óvulo, aumentando las posibilidades de embarazo. A diferencia de la in vitro, no es necesario la extracción previa de óvulos. Simplemente tras un control endometrial, los especialistas pueden prever cuando es el momento idóneo para realizar la inseminación artificial.
Técnicas de inseminación artificial. Existen dos tipos:
- Inseminación Artificial Conyugal (IAC). Con una tasa de éxito del 57%, esta técnica consiste en colocar espermatozoide de la pareja previamente extraidos.
- Inseminación Artificial Donante (IAD). En este caso, la procedencia del semen es de una persona anónima, es decir, un donante escogido del banco semen. En este caso, las tasas de éxito suben hasta un 65%.
Tras estas indicaciones, seguro que te preguntas el éxito que tiene esta técnica, es decir, su probabilidad en función del rango de edad en la que la futura madre se encuentre. Por ello, hemos recopilado, para tu mayor tranquilidad, los últimos registros de la Sociedad Española de Fertilidad:
- Para mujeres menores de 35 años. Se produce la gestación en el 13.8% , menor que la de aborto que asciende al 15.9%.
- En mujeres entre 35 y 39 años. La probabilidad de aborto sube al 21%, llegando al 13.3% de éxito en la gestación.
- Por último, para aquellas mujeres que superan los 40 años, el 10.3% podrán gestar con éxito, frente al 34% de aborto.